Fue en una canción

Te conocí en una canción. Una canción de amor. En inglés, de esas que tarareabas al revés.

Había música entre nosotros. En cada uno de tus latidos vibraba una melodía que estremecía mi cuerpo y me suplicaba quedarme a vivir en tu pecho.

Fue en un viejo blues, bajo un cielo azul, y cuando llegaste, el mundo se detuvo.

Fue en una canción que hablaba de tus labios rojos y su sabor a blend.

Te conocí en esa canción, mientras bailabas allá arriba, tan alto que el aire me faltaba. Y las estrellas, rendidas, caían como una lluvia de luz sobre nosotros.

Fue en una canción que sonaba en tu habitación, después de hacer el amor. Esa vez también te pedí perdón y te volví a perder.

Tu nombre sonaba en una canción, dentro de un sueño escondido en un recuerdo. Ahí te guarde durante mucho tiempo.

Nos descubrimos una vez más. Nos miramos como si fuera la primera vez, y nos sentamos a escuchar una vieja canción que nos llevó a un tiempo en que todo fue más fácil.

Fue en una canción que te besé por primera vez. Fue en una canción que escribí tu nombre en mi pecho.

Y fue en una canción que te dije que te quiero.